YOU ONLY LIVE ONCE
Estas últimas semanas han sido heavy, caóticas, reflexivas y nostálgicas. A diferencia de mis post anteriores en donde me jactaba de mi nutrida vida social y nocturna, ahora sólo puedo decir que me la he pasado de la casa a la pega, de la pega a la clínica, de la clínica a la casa. Si fuera por horas cumplidas, ya estaría titulada de médico y con honores.
Pero entre tanta bata blanca y olor a alcohol (de ese que se usa para desinfectar, obvio) me he dado un tiempo para filosofar "trígidamente"...
¿Se han dado cuenta de que vivimos tranquilamente nuestras vidas (valga la redundancia) sin tomarle el verdadero peso que éstas se merecen? ¿Se han dado cuenta que sólo vivimos una vez, por lo tanto tenemos que aprovechar cada momento que pasa? ¿Se han dado cuenta que mientras unos luchan por vivir otros se pasan las horas como quien deja correr la llave de agua?
Yo creo que muchos si lo habían hecho, pero es mucho más fácil hacerse el tonto, el "a mi no me va a pasar esto", que empezar a ponerse realmente las pilas, darse el tiempo de V.I.V.I.R con todas sus letras, aprovechar cada momento con las personas que queremos, con los que tenemos al lado y expresar lo que sentimos sin vergüenza.
Qué cuesta tomarse unos minutos del día para decir "te quiero", o cada noche despedirse de los papás con un beso, o salir con los amigos, o llamarlos para ver cómo están, o atreverse a decir lo que uno nunca aperró, o conversar con los abuelos y darse el tiempo de escucharlos, etc, etc, etc.
Nada, no cuesta nada, son sólo unos minutos menos de ver tele o estar vegetando en el sillón, pero son experiencias y afectos que se ganan y valen mucho más que cualquier cosa.
Finalmente anoche murió mi tío... después de largas semanas hospitalizado. Tenía 44 años, una esposa, 4 hijos, una mamá, 5 hermanos y millones de sobrinos y parientes que lo adoraban. Hace 7 años le diagnosticaron cáncer a la tiroides y nadie nunca imaginó que no se la pudiera contra esa maldita enfermedad. Todos pensábamos que era una batalla fácil de ganar... por poco no nos equivocamos, porque la peleó hasta el final, con más fuerza de la que nadie pudiera sospechar.
Al ver día a día su lucha por seguir viviendo, por aprovechar cosas tan comunes y corrientes como el estar con la familia o los amigos, y al ver a sus hijos sufrir porque no pudieron decirle a su papá todo lo que hubiesen querido, me dije a mi misma "misma, aprovecha lo que tienes", valga decir familia, amigos, parientes, salud, inteligencia, hasta mascota. Y más que eso, hay que dar gracias cada día por cada uno de los momentos que pasamos.
Así que si me ven más efusiva que antes, más hincha pelotas que antes, más querendona, más llorona, más mamona no se asusten... sólo estoy viviendo a concho.
La vida es frágil y como tal hay que cuidarla y aprovecharla... bueno, y no está de más decir que me aprovechen a mi también (ojo, no dije "se aprovechen de mi"), Panfrica no es highlander, jajajaja.
...Dedicado a Gerardo Valenzuela.