SI YO FUERA...

Ufffff....ya me imagino las cosas que van a pensar de mi después de este post. Pero como siempre me ha importado bien poco expresarme libremente...acá va.

El fin de semana pasado, conversando con los amigos de siempre, salió un tema de discusión que solo aparece cuando ya no hay nada más que conversar o se está pasado en copas: "¿Con qué persona de tu mismo sexo tendrías un affaire?"...

Típico que el cohibido cartuchón al tiro salta y dice "yo con nadie, jamás!!", "a mi me gustan solamente las mujeres" (si es un hombre), o "no, a mi me encantan los minos" (si es mujer). Pero raramente ese día todos perdieron la vergüenza y confesaron sus secretos.

No delataré a nadie, sólo diré las respuestas...y entre los machos recios aparecieron nombres como David Beckham, Brandon Boyd, y otros. Las mujeres nos mantuvimos recatadas, ninguna dijo nada, pero probablemente todas pensaron en Angelina.

Menos yo... que pensé en la niña de las fotos. Su nombre es Katherine Moenning, más conocida como Shane en la gran serie "The L World". Para mi ella es la mina ideal, y si yo fuera "torti", ella cumpliría con todos los requisitos: tiene la actitud de hombre canchero, maldito, pero a la vez es delicada y linda. ¿Qué más se puede pedir? Si tuvieron la oportunidad de verla en la serie, me entenderán lo que digo.

¿Por qué estoy escribiendo esto, pensarán ustedes?...bueno, es que después de días de reflexión sobre el tema, llegué a la conclusión de que no tiene nada de malo decir que encuentro increíble a una mujer, porque tengo tan claro lo que soy, mis gustos, mi tendencia sexual y mis principios que no siento que confesando algo así pudiese llegar a caer en tentación, desviarme o ser menos mujer. Tener el valor de decir esto refuerza la propia identidad mucho más que el negar lo que uno piensa por miedo al que dirán.

Y yo tengo tan claro que me gustan los hombres como que encuentro linda a "Shane". Una cosa no opaca a la otra ni se contraponen. Y menos me hace ser rara.

Dejémonos de criticar y seamos capaces de reconocer la belleza en el mismo sexo como algo absolutamente natural, sin tener miedo a ser juzgados, y por sobre todas las cosas, sin que se preste para dudar de lo que realmente somos: mujercitas y hombrecitos. He dicho!!!